
El cerebro es considerado como una de las partes más importantes para el funcionamiento óptimo del cuerpo humano. Algunos lo describen como el centro de mando donde el cuerpo es controlado.
“El cerebro contiene miles de millones de células nerviosas, todas están organizadas en patrones que coordinan el pensamiento, la emoción, la conducta, el movimiento y la sensación. Un complicado sistema de nervios interrelacionados conecta el cerebro con el resto del cuerpo, por lo que la comunicación puede ocurrir en instantes”, detalla Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
El buen desarrollo de este órgano depende en parte de un estilo de vida saludable, lo que incluye una alimentación sana. Para recibir una asesoría nutricional especializada se debe consultar a un nutricionista para obtener un plan de acuerdo las necesidades individuales.
“Las membranas celulares del cerebro son flexibles, especialmente con una alimentación rica en AGPCL (ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga) omega-3, EPA y DHA. Estas son las grasas que permitieron la evolución del cerebro humano“, explica el portal web.
Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica que las grasas poliinsaturadas, dentro de las cuales están omega-3 y omega-6, son importantes para el crecimiento de las células y el funcionamiento del cerebro. Asimismo, son beneficiosas para la salud porque contribuyen a disminuir el colesterol malo en la sangre y cuidan el corazón.
La Biblioteca señala otros de sus beneficios asociados con el corazón.
- “Ayudan a reducir los triglicéridos, un tipo de grasa en la sangre.
- Reducir el riesgo de desarrollar latidos cardíacos irregulares (arritmia).
- Retardar la acumulación de placa, una sustancia que comprende grasa, colesterol y calcio, que endurece y bloquea las arterias.
- Bajar ligeramente la presión arterial”.
Por su parte, los omega-6 pueden contribuir positivamente a:
- “Controlar el azúcar en la sangre.
- Reducir el riesgo de diabetes.
- Bajar la presión arterial”.
Para obtener estos beneficios se pueden incluir los siguientes alimentos en la dieta diaria:
- Pescado y mariscos (en especial, pescados grasos de agua fría, como salmón, caballa, atún, arenques, y sardinas).
- Nueces y semillas (como semillas de linaza, de chía y nueces negras).
- Aceites de plantas (como aceite de linaza, aceite de soja (soya) y aceite de canola).
- Alimentos fortificados (como ciertas marcas de huevos, yogur, jugos, leche, bebidas de soja (soya) y fórmula infantil).
Cuidar el cerebro
El portal Mejor con Salud, especializado en salud y cuidado personal, señala algunos nutrientes esenciales para mantener el cerebro en forma:
Proteínas
Las proteínas son saludables para el cuerpo humano, porque portan al cerebro aminoácidos para la síntesis de neurotransmisores. Se encuentran en:
- Lácteos.
- Huevos.
- Pescados y mariscos.
- Carnes.
- Soya
Antioxidantes
Los antioxidantes contribuyen a prevenir a frenar los daños de los radicales libres y prevenir enfermedades, según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. Se pueden encontrar en los siguientes alimentos:
- Moras.
- Brócoli.
- Zanahorias.
- Arándanos.
- Granada.
- Cítricos.
- Ajo.
- Tomates.
- Uvas.
- Cereales de grano entero.
Café
De acuerdo con un estudio del Journal of Alzheimer´s Disease, el café tiene efectos positivos en el cerebro, debido a que tiene antioxidantes y compuestos bioactivos que ayudan a la prevención de los daños cerebrales. Cabe resaltar que debe consumirse moderadamente. En caso de tener alguna enfermedad o condición especial, se debe consultar al médico.
Cereales integrales
Mejor con Salud también destaca que estos alimentos tienen ácido fólico y vitamina B6, los cuales son importantes para el cerebro, ya que si ocurre un déficit puede ser perjudicial. Algunos de estos incluyen:
- Trigo.
- Cebada.
- Arroz.
- Maíz.
- Avena.
- Centeno.
- Quinoa.
- Trigo sarraceno.
- Sorgo o mijo.
Fuente: semana